Si el vino viene, viene la vida...

Mi mejor amigo del mundo abrira prontamente una vineria, y no solo eso sino que tambien amablemente me ofrecio el puesto de "demoledor de mamposteria inservible del nuevo local" y pude destruir todo lo que estubiera a mi alcanze. Asi es que en el dia de ayer le pude dar a mi humanidad el festin de caos que andaba necesitando y ademas ajudar a otro ser humano. Despues de romper todo lo que estubiera entorpeciendo la nueva planificacion locataria de mi amigo, nos miramos y entendimos que yo lo habia ayudado tanto a él como él a mi.
Transpire, me corte las manos, destrui una pared con un martillo, arranque una pared entera con las manos como si fuera Hulk, rompi un estante a piñas y otro a patadas, y despues de todo, lleno de polvo, jadeando y cansado, volvi a mi casa, me bañe y dormi feliz como hace mucho tiempo no lo hacia.
Asi que ojo... a los que pensaban que estaba acabado les dejo el mensaje ... Volvi, y esto recien empieza

Te voy a extrañar

Me hubiera gustado que mi regreso al mundo blogueril fuera distinto pero la vida me sacudio las ideas esta semana, la vida, o el destino , o dios, o el diablo, o la muerte, o la madre naturaleza o quien mierda sea se llevo a mi abuelo este domingo y con él se fue una gran parte de lo poco de niñes que me quedaba. Asi es que me decidi a mostrarles a todos como era mi abuelo y como lo extraño. Gracias a mis amigos, parientes y conocidos por la buena onda.

un tiempito

El puto de mi jefe creyo conveniente sacarme lo unico que mantenia mi mente y mi alma de buen humor en este trabajo de mierda, me saco internet. Asi que gente linda que conoci en la web, y amigos de carne y hueso que descubrian mi otro lado aca, les dejo un saludo y mis promesas de que volveré con mas ganas y con un chiste, cuento, foto o noticia que me inspiré, besos para todos y hasta luego

Musicos enamorados

El es lindo pibe,

pero ella definitivamente es mas linda...

El es un musico consagrado,

y ella esta dando sus primeros pasos (en la vida)

Y aunque a veces se peleen,

Se estan enseñando a caminar mutuamente...

Sabias que...

El 18 de marzo de 1610 zarpo del puerto de Nueva España (actual puerto de Veracruz, México) el galeón de carga “Titánico”, barco mercante español que trasportaba aproximadamente 450 toneladas de plata de las minas de Potosí, con una tripulación de 57 marineros, la gran mayoría de ellos reclutados en prisión . El barco era dirigido por el afamado Capitán W. A. Rose, un reconocido navegante ingles que trabajaba para la corona española, este capitán era famoso por haber asesinado a 30 integrantes de una de sus tripulaciones al descubrir que se tramaba un motín. En sus 10 años de existencia el “Titánico” había realizado 9 viajes ida y vuelta entre América y Europa siendo por esto considerado como el barco mas difícil de hundir del mundo, y el Capitán Rose se gano el apodo de “Lucky” Rose por no haber perdido nunca una carga, ya que en esa época los piratas habían sido blanqueados por el rey de Portugal y atacaban a todos los barcos que trasportaban riquezas sea cual sea su bandera, saqueando y hundiendo miles de barcos sin temor a represalia ya que actuaban bajo la protección de la corona portuguesa que obtenía un porcentaje de cada abordaje.
El galeón debía partir el día 11 de Marzo pero por una torrencial lluvia que complico el traslado terrestre el cargamento llego una semana después de lo previsto, así que con ya una semana de retrazo el Capitán Rose tomo la equivoca decisión de zarpar aun sabiendo que las condiciones meteorológicas eran considerablemente malas.
Jamás se volvió a tener noticias del barco, de la carga ni de ninguno de sus tripulantes y la corona española reclamo a el rey de Portugal por considerarlo responsable de su desaparición. Con el tiempo empezó a circular la versión de que el Capitán Rose había matado a toda su tripulación luego de que el viento arrancara todos los mástiles del barco por la negativa del Capitán a arriar las velas en la tormenta. Eso nunca pudo comprobarse y con el tiempo se convirtió en una leyenda de marineros, el mito fue tan conocido que el 12 de abril de 1912 zarparía por primera vez del muelle 44 del puerto de Southampton con 2.228 pasajeros el barco de pasajeros mas grande y lujoso del mundo llamado “Titanic” en honor al barco mas difícil de hundir del mundo que surcara los mares casi 300 años atrás.

Una mañana diferente.

Se despertó tranquilo, como no lo hacia desde hace años. Disfruto de esa extraña sensación de bienestar que duraba tan solo unos segundos cada mañana antes de salir del mundo de los sueños.
Después de hacer volar su mente ese tiempo extra abrió los ojos.
El paisaje que vio lo devolvió de un golpe a la realidad; cadenas, grilletes, una ventana con barrotes, y la gris suciedad de las paredes. En su celda no había sol, por la reducida ventana con rejas apenas entraba un poco de claridad, y con un poco de suerte por las tardes tenia la posibilidad de verlo cuando lo dejaban salir al patio.
Jamás supo realmente el porque de su encierro, hacia ya tanto tiempo que vivía en esa prisión que le parecía haber estado allí toda su vida, lo único que sabia era que cualquiera sea el pecado que hubiese cometido, ya lo había pagado, y con creces.
Aunque había pasado más de la mitad de su vida en una celda aun conservaba su imponente físico casi intacto y el tiempo no había borrado la salvaje naturaleza de su espíritu, ese indomable corazón aventurero que siempre fuera la brújula de su vida.
Toda la disciplina y castigo recibido apuntaban a borrar toda idea de rebeldía, pero en el fondo de su mente la idea de libertad seguía fuerte como el primer día.
Y esa mañana era diferente, diferente del resto de las mañanas, era la mañana que había decidido dar un vuelco a su vida, era la mañana en la cual había pensado durante mucho tiempo, la mañana en la que volvería a ser él mismo, la mañana en la cual le demostraría al mundo que aunque estuviera cautivo en un circo, aun seguía siendo el rey de la selva.

La playa

Un día de playa, un aburrido, caluroso y agobiante día de playa mas, José acostado en la arena se encerraba en aquella novela que por suerte había traído para pasar las horas. Todavía no entendía como él había aceptado ir de vacaciones al mar con lo mucho que le disgustaba, hubiese preferido diez veces, mil veces mas ir a Córdoba, a la magnifica tranquilidad de la sierra, pero no, por mayoría de votos se había elegido Mar Del Plata.
Habían pasado ya cuatro de los seis días de vacaciones que su trabajo le permitía tomarse, y lo había soportado bastante bien; había soportado la molestia de la arena metida en cada recoveco del cuerpo, las colas de los restoranes a la noche, las miles de sombrillas, los doscientos veraneantes por metro cuadrado que saturaban la playa, los molestos chicos jugando a la paleta, los viejos jugando a ese juego con discos de que se lanzan del cual no recordaba el nombre ni le interesaba recordar, había soportado las discusiones de la familia ante cada elección y había salido airoso de todo eso.
Tan mal no me fue -pensaba- después de todo solo quedan dos días y vuelvo a Buenos Aires, jamás pensé que extrañaría la oficina, con lo que la odio, pero creo que es un poco menos horrible que la costa.
En todo eso pensaba mientras clasificaba con resignación la fauna autóctona de la región, que consistía en un grupo de señoras de la tercera edad que se asoleaba más de lo aconsejable, varios niños divididos entre los que construían castillos de arena y los que destruían los mismos, una veintena de adolescentes que caminaban de aquí para allá escondiendo panza disimuladamente y trabando los pectorales de una forma muy graciosa, varios hombres que parecían no haber escuchado nunca de la existencia de algo llamado gimnasio, ni de algo llamado dieta, y varios grupos de chicas jóvenes que se codeaban entre ellas y señalaban al musculoso y dorado bañero que indiferente miraba el horizonte creyéndose algo un poco mas que un dios; cuando de pronto la vio, por un momento no creyó en lo que sus ojos le decían, pero ahí estaba, a solo unos metros de él, recostada sobre una manta de playa, llevaba una diminuta biquini que apenas podía contener su voluptuoso cuerpo, que parecía tallado en el mas puro bronce, sus piernas resplandecían con el sol y el viento peinaba su pelo rubio hacia un costado dejando descubierto el rostro mas bonito que jamás hubiese visto, sus ojos parecían el reflejo del cielo y como si fuera poco apuntaban directamente... a él. Su primera reacción fue torpe, sin pensar se levanto y giro hacia los lados tratando de corroborar la presencia de otra persona a su lado a quien estuviese mirando la preciosidad rubia pero no, era a él; este movimiento pareció divertir a la señorita que sonrió dejando ver una fila de blanquísimos dientes enmarcados por unos labios que saciarían el hambre de cualquier bestia salvaje, y con un suave movimiento de su mano lo invito a acercarse.
En ese instante el mundo dejo de girar, desapareció la gente y el ruido, solo estaban el cielo, el mar, él y ella. Él se acerco lentamente, como el zorro sin domesticar de El principito, hasta llegar a menos de un metro de distancia de ese oasis con forma humana que había encontrado.
Hola, mi nombre es Mariana, cual es el tuyo? - dijo -.
Eeee, eeesteee, José - respondió con un hilo de voz -.
Mirándola de cerca era más hermosa de lo que le había parecido, y sacando fuerzas de algún recóndito lugar pregunto - Estas sola?
-Si, sola, hasta que viniste, hace cuatro días que te veo y llegue a pensar que jamás levantarías la vista de ese libro.- dijo mientras lo miraba inocentemente-
A mi? Vos me estas cargando no?- respondió sin entender-
Si, a vos tonto, hace cuatro días que te veo y cada día me gustas mas – le retruco acercando un poco su contorneado cuerpo al de él-
Esto era mas de lo que su mente podía soportar, como era posible que esa princesa rubia lo vigilara hace cuatro días y el no se diera por enterado, tan pelotudo era? tan buena era la novela que leía como para perderse a ese bombón? no, para nada, si era un policial berreta que compro en los saldos de una librería, ese libro que tanto había querido por considerarlo salvador no era mas que una venda que no le dejaba ver la hermosa realidad que se estaba perdiendo.
Decidido a no dejar pasar un minuto mas, le dijo mientras sentía que se perdía en sus ojos – Yo acabo de descubrirte y no necesito mirarte cuatro días más, con estos 5 minutos me alcanza para decir que vos también me gustas, y mucho…- mientras estrechaba aun más la estrecha distancia que separaban sus cuerpos.
Su aroma le rompió el cerebro, y perdido en un éxtasis de lujuria la tomo de la cintura y la beso, la beso apasionadamente, la beso como jamás había besado a ninguna mujer, y ella respondió el beso, y valla que lo respondió, sus labios se recorrían y se fundían hasta no diferenciar uno del otro, se besaban con tanto arrebato que sus dientes se chocaban hasta casi estallar, sentía como su busto se apretaba contra su pecho, y voces, voces lejanas, voces que no quería escuchar… José…, José…, papá…, paaapaaaá …
- Queee..., que pasó…?, - exclamo aturdido.
- No se estabas como embobado mirando el mar – dijo su mujer mirándolo extrañada.
- Si papá, y tenias una sonrisa de idiota!!- comento divertido su hijo
- Para mi que te hizo mal el sol, te dije que te pongas una gorra - le recrimino- lo único que falta es que te insoles y te tenga que cuidar los últimos dos días de vacaciones.